5 señales de que tu relación no posee futuro No tienes idea administrar las crisis. El potencial de las parejas se ve precisamente en el momento en que las cosas van mal, no en el momento en que todo va bien. No hay aceptación. Sin planes para el futuro. No hay seguridad entre ustedes. No hay esfuerzo ni trabajo.
Es triste comprender que la monotonía puede terminar con cualquier relación en un largo plazo, opuesto a la creencia de que cuantos mucho más años pasen mucho más seguridad va a haber, y no es de esta manera, conque presta atención a estos 8 signos.
Es común que las parejas tengan avatares durante los años. Intranquilidades, trabajo, dinero, hijos (si los tienes)… la vida misma nos transporta a la monotonía. Hacia una rutina que nos puede llevar a cabo meditar que si la aventura es osada, la vida diaria es mortal.
5 señales de que tu relación no posee futuro
Como menté, es realmente difícil adivinar el futuro con seguridad. En verdad, aun las bolas de cristal, las cartas o los hechizos no te asistirán a solucionar o cambiar las cosas.
Lo que sí puedes llevar a cabo es prestar atención a estas 5 señales que adivinan catástrofes en las relaciones. Esto es, esos que, si no se corrigen, revelan un incierto futuro en pareja.
Claves para comprender si tu relación no posee futuro
Te has cuestionado en algún momento: “¿Tengo futuro con mi pareja?”
Tanto si andas empezando una relación tal y como si ahora la consolidaste, probablemente te haya surgido esta duda.
Falta de deber
Entre los rastros de de qué forma comprender si una relación no posee futuro es la carencia de deber.
Debes comprender que una relación no se habla solo de estar con la persona que disfrutas, sino supone un esfuerzo plus, que es estar puesto en compromiso y animado para efectuar acciones que favorezcan a los dos, aparte de respetar pactos con los que llegaron. Si este aspecto no está que se encuentra en tu relación, es hora de comenzar a desarrollarlo.
Conciliar trabajo y hogar
Entre las virtudes de tener una relación sana con tu pareja es el acompañamiento, y una parte de ese acompañamiento se apoya en comunicar responsabilidades. Entre las señales que tienen la posibilidad de señalar que la relación no va bien es en el momento en que te percatas o te percatas de que el mayor peso de la relación y todo cuanto ello acarrea lo llevas tú y no la otra persona.
Por poner un ejemplo, ser la persona que se hace cargo de todos y cada uno de los menesteres del hogar o que se preocupa por todos y cada uno de los puntos relacionados con la pareja, como la economía doméstica, acaba por estropear a la pareja de una manera u otra.