Entre los más frecuentes resaltan estos ocho: Compresión labial. Cubre tu boca. Golpee el cuello Movimiento de las unas partes del cuerpo. En el momento en que la sorpresa no es verdadera. Resfrege sus ojos. Toca tu nariz. Baje u esconda sus pulgares.
¿Se puede advertir a un mentiroso por su comunicación no verbal?
Advertir una patraña no es moco de pavo. Saber algunos patrones de accionar no garantiza que hayamos ido a advertir a todos y cada uno de los mentirosos, por el hecho de que distintas personas tienen la posibilidad de reaccionar de forma diferente en el momento en que dicen algo que no es verdad. No obstante, como asegura el sicólogo y grafólogo Roberto Espinosa, “toda patraña crea una reacción psicofisiológica”. Por este motivo, existen algunos aspectos usuales que nos tienen que realizar dudar que no se nos dice la realidad o que se nos está escondiendo algo. Ciertos son verbales y otros no. Aquí nos marchamos a ocupar de las señales que se hacen con el cuerpo o, lo que es exactamente lo mismo, de la comunicación no verbal.
La mirada del mentiroso
Según los especialistas, es erróneo meditar que los mentirosos no tienen la posibilidad de verse a los ojos, esto solo aplica para los pequeños pequeños; en verdad, un individuo que engaña mira la cara de la persona a la que procura mentir para procurar entender si le cree.
«El mentiroso va a ver tu cara, tus ojos en todo momento, tu cerebro se está amoldando cada segundo al engaño, mudando la agilidad del charla, el tono y los datos pues mira en todos y cada instante que lo que afirmas sea creíble para la otra persona; además de esto, esa persona no pestañea por el hecho de que tiene temor de perder ese aspecto que busca”, enseña el portal “Una cabeza refulgente”.
Otras señales nombrados por psicólogos
Si andas intentando encontrar de qué forma advertir la patraña en otros signos, aquí te compartimos mucho más movimientos del lenguaje corporal que ciertos psicólogos hablan de como signos de patraña:
13. Mantén las manos ocultas, por servirnos de un ejemplo, bajo la mesa, en los bolsillos o tras la espalda.
La respiración y los latidos del corazón se aceleran.
La continuidad respiratoria cambia, la respiración se regresa mucho más pesada. Esto causa que la continuidad cardiaca cambie gracias a una continuidad continuidad respiratoria marcadamente modificada. En un caso así, sería bueno tomar en consideración asimismo lo que señalamos para la rigidez de la carrocería.