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Cuáles son los pecados más graves

    El orgullo, la codicia, la lujuria, la furia, la gula, la envidia y la pereza son las siete pasiones del alma que la tradición eclesiástica ha predeterminado como “errores capitales”.

    INCREDULIDAD

    La incredulidad es la razón por la que Dios es inútil de accionar en la vida de varios, pues prácticamente todos los milagros que Jesús efectuó él afirmaba en el final: ‘Ve, tu fe te salvará ‘ , esto es, en la temporada de Cristo varios sufrían patologías, preocupaciones y hasta pertenencias demoníacas, pero Cristo solo podía sanar a los que creían.

    Él mismo ha dicho: ‘Al que cree todo le resulta viable’ (1 Corintios 6:18).

    Cuál es el único pecado que no se disculpa

    El Apóstol Juan escribió: «Si confesamos nuestros errores, él es leal y justo para perdonar nuestros errores y limpiarnos de toda maldad (1 Juan 1:9). Dios es leal para perdonar nuestros errores si confesamos nuestra culpa enfrente de él. Sencillamente nos da el perdón que requerimos para tener una exclusiva vida en Cristo. Pero hay un pecado que no puede ser perdonado, y ese es el pecado de blasfemar contra el Espíritu Beato. La Biblia afirma: “De ahí que les digo que todo pecado y blasfemia va a ser perdonado a los hombres, pero la blasfemia contra el Espíritu Beato no va a ser perdonada a los hombres” (Mateo 12:31).

    ¿Qué es la blasfemia contra el Espíritu Santurrón? La blasfemia contra el Espíritu Santurrón es el único pecado que no puede ser perdonado. Es el pecado de denegar la obra de Cristo en nuestras vidas y negar su perdón. Es el pecado de mencionarle a Dios que no requerimos su asistencia para cambiar nuestras vidas. Este es un pecado realmente serio pues le nos encontramos diciendo a Dios que no somos pecadores y que no requerimos su perdón. Nos encontramos negando la obra de Cristo en nuestras vidas. Nos encontramos diciendo que no requerimos a Cristo para nuestras vidas.

    ¿Qué son los errores veniales?

    Según la Iglesia Católica Romana, los errores se clasifican en 2 categorías: errores fatales y errores veniales. En la Biblia charla del pecado como un aspecto primordial que todo católico en su historia debe saber y respetar.

    Se define pecado venial como aquel que no excluye del reino de Dios a quien lo comete, esto es, son errores menos graves o se cometen sin tener plena conciencia de esto. La religión católica lo detalla como un pecado que no divide al sujeto de Dios (de su amistad y felicidad) y no causa la desaparición del alma.

    ¿Qué son los errores fatales y veniales?

    Un pecado grave o mortalmente grave es la violación consciente y deliberada de la Ley de Dios en un tema grave, por servirnos de un ejemplo, idolatría, adulterio, asesinato o calumnia. Todo lo mencionado es dificultosamente opuesto al amor que debemos a Dios ahora Él, al prójimo. Como enseñó Jesús al condenar aun a quien mira a una mujer con pésimos deseos, el pecado puede ser de adentro (solo selección de deseo) y de afuera (selección de deseo seguida de acción). La persona que por su intención desea fornicar, hurtar, matar o cometer otro pecado grave, ahora ha insultado dificultosamente a Dios al seleccionar desde adentro lo que Dios ha contraindicado.

    El pecado mortal tiene por nombre mortal pues es la desaparición «espiritual» del alma (separación de Dios). Si nos encontramos en estado de felicidad, nos hace perder esta vida sobrehumano. Si morimos sin arrepentirnos, lo vamos a perder por toda la eternidad. No obstante, si volvemos nuestro corazón a Él y nos llega el Sacramento de la Penitencia, nuestra amistad con Él se restituye. Los católicos no tienen la posibilidad de recibir la Comunión si tienen errores fatales no confesados.

    Utiliza esta lista de errores para tu examen de conciencia

    Idolatría: Venerar a otros dioses o venerar elementos, sentimientos o personas. Adivinación y Hechicería: Soliciar asistencia espiritual de poderes diferentes a los de Dios. Sacrilegio: profanar o tratar indignamente los sacramentos o cualquier cosa relacionada con Dios. Ateísmo: Dejar de opinar en Dios.

    Blasfemia: Charlar mal de Dios. Perjurio y Juramentos Falsos: Prometer algo que sabes que no es cierto.

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