Estos son los tres géneros de amor que experimentarás en tu vida Amor idealista. Asimismo popular como ‘cuento de hadas’, este es el género de amor que habitamos la adolescencia y que pensamos que va a durar toda la vida. amor por necesidad Amor inesperado.
Según los psicólogos, el auténtico amor solo pasa por la grieta de nuestro corazón, tres ocasiones. Las otras relaciones, entonces, solo aparecieron para llevar nuestra bolsa de vivencias, esas que enriquecen y nutren nuestra experiencia de vida, donde vamos a tener algo que contar y algo que descontar. Pero estos tres amores auténticos que tienen la posibilidad de darse a lo largo de nuestro paso por el planeta vienen a dejarnos algo. Si el cariño como vida tiene algo que enseñarnos, ¿qué nos ofrece todos los tres dones de Afrodita? El primer amor En el momento en que ese amor entra en nuestras vidas, pensamos que verdaderamente hemos encontrado al Príncipe Azul. Las mariposas en tu estómago semejan revolotear sin frenos y todo se regresa rosa. Tiende a ser el género de amor que nos llega en la adolescencia, pero puede demorar aun mucho más en visitarnos. Todos pasamos indudablemente por ese halo de romance angelical que nos acaricia el alma. En el momento en que descubrimos todas y cada una de las conmuevas que el primer amor es con la capacidad de hacernos sentir, ese amor aterrizó en nuestras costas y se ancló allí para el resto de nuestras vidas. No obstante, la eternidad del «para toda la vida» es todavía irrealizable de determinar, si bien, así sea por la edad o por nuestras situaciones actualmente, pensamos que es la primera y que va a ser la última. Lo que mucho más hacemos en este primer desarrollo es centrar todas y cada una nuestras energías en esa persona particular, en de qué forma nos observamos a nosotros y de qué forma nos ve nuestro ambiente. Siempre y en todo momento es de esta forma, si bien el cariño propio, ese cariño por nosotros que jamás debemos desatender, es verdaderamente el primer amor. De ese dulce amor aprendemos a sentir esos primeros latidos veloces en nuestro corazón, descubrimos de qué se habla, vamos aprendiendo de qué forma es. Si bien no es uno que dure toda la vida, es un amor que sabe dulce y también inocente. Es el que guardamos en el cofre de los bienes mucho más preciosos de nuestra vida. El segundo amor En el momento en que llegamos a este segundo amor, pensamos que ahora disponemos alguna experiencia del primero, pero no en todos los casos es de esta forma. Las enseñanzas que nos deja cada relación, o cada amor que nos penetra intensamente, se guardan en nosotros, si bien no en todos los casos seamos capaces de comprobar estas páginas al arrancar un nuevo sendero. Hablamos de obtener de estas vivencias que nos comenten algo que nos ayuda para toda la existencia. Tenemos la posibilidad de charlar largo y tendido de los fallos que comunmente cometemos, pero el más frecuente es que quizás tengamos temor por una mala relación previo o sencillamente por el hecho de que pensamos que este amor nos irá a marchar así, intentamos de realizar Es muy distinta en esta ocasión, a la previo, que la persona con la que nos encontramos es todo lo opuesto. No en todos los casos es de este modo. Si dejamos fluir la relación sin perder de vista lo que procuramos, pero sin presionarnos en todo momento, si todo fluyese, sería diferente. Pero comunmente es ese amor que recibimos con vivencias precedentes, con algunos temores, es el cariño con el que tenemos la posibilidad de presenciar el mal de la decepción. Puede transformarse en un amor que nos hiere y nos deja un gusto amargo. En ocasiones, si el sentimiento fue bastante profundo, tendemos a procurarlo si bien todo haya terminado. Pensamos que ofrecer vueltas y regresar al mismo punto de inicio arreglará lo que se ha roto. La experiencia, en un caso así, es un tanto mucho más complicada, pero siempre y en todo momento sobra algo para sostenernos bien y cargar nuestra lista de enseñanzas. El tercer amor En ocasiones ni pensamos que nos volverá a pasar. Frecuenta pasar que transcurrido un tiempo nos habituamos a no dejarnos deslumbrar enseguida por alguien, ya que ahora pasamos por muchas vivencias. Pero jamás nos encontramos exentos de regresar a enamorarnos y regresar a entregarnos completamente. Es el género de amor que das sin procurarlo, en el momento en que por el momento no lo esperas, el que pasa sin que lo propongas, quizás de ahí que deberías estimar que quizás no se ajuste a las medidas y reglas para las que podrías diseñar. ti en relación a la iniciativa del amor verdadero, el que podrías imaginar. Jamás va a ser como lo soñaste. No va a llegar a tu vida como lo deseabas, va a tener complejidades con las que vas a aprender a lidiar, va a ser diferente a eso que ahora has vivido. Bueno, no te lo aguardabas, pero te pasó. Si tuviste un concepto desde el instante en que eras joven y has anotado ciertos conceptos de lo que es y ha de ser el cariño, en este momento es el instante de descartar esos criterios. En el momento en que llega el auténtico amor, no semeja nada, no iguala nada, rompe todos y cada uno de los esquemas para quedarse y marcar su presencia. Vas a aprender a sentirlo, a gozarlo y, más que nada, a brindarlo. Lo esencial en las cosas del alma, sea como sea el cariño que te halles viviendo, es que cada amor te deje algo, lo que logres estudiar, lo que logres rememorar con una sonrisa, lo que te sostenga ardiente el corazón. Si es una experiencia dura, considérala una parte de tu equipaje, no una cruz con la que debes vivir, sino más bien una experiencia que te servirá bien por el resto de tu vida. De todas y cada una de las relaciones que poseemos, algo que llevamos con nosotros, algo queda, sea o no un enorme amor, un amor verdadero. Ten en cuenta que el cariño llega en algún momento a nuestras vidas, no pienses que una mala experiencia acaba, al revés, es en el momento en que se abre una puerta a un nuevo comienzo.
Concepto de los 3 amores de tu vida
Teóricamente, da igual cuántos amores poseas, va a haber 3 que van a ser distintas a el resto en tu vida.
Estos 3 tienen distintas especificaciones, suceden en distintas instantes y la mayoria de las veces suceden en orden, pero no siempre.
Amor maduro
Este tiende a ser el último, si no el mucho más fantástico. La conexión que establecerás en él, verdaderamente no la vas a poder argumentar, pues va a ser ese amor que no aguardabas que sucediese. No obstante, vas a dejar que ocurra, sin hacer esperanzas. Sencillamente vas a ser tú y vas a dejar que el tiempo te sorprenda.
El cariño maduro es el que sanará las lesiones de tus amores pasados. Te va a hacer sentir feliz y te va a enseñar lo esencial que es quererte a ti antes de querer a otra persona.
Segundo amor – Narcisista
De los tres amores que vamos a vivir, este se distinguirá por ser rigurosamente con pasión. Gracias a las defraudes vividas en relaciones precedentes, se crea una dependencia con la pareja.
Es común en esta etapa buscar a alguien con el propósito de arreglar el daño que nos hicieron. Que nos protega, pero más que nada que nos asista a recobrar la seguridad en el cariño.