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Qué dice Jeremías 17 7

    7 Bienaventurado el varón que confía en Jehová, y cuya b seguridad es Jehová. 8 Pues va a ser como árbol plantado al lado de las aguas, que echa sus raíces al lado de la corriente, y no temerá en el momento en que llegue el calor, sino su hoja va a estar verde; y en el año de sequía no se afligirá ni dejará de ofrecer fruto.

    Leamos la palabra del Señor esta mañana en el libro de JEREMÍAS 17:7-8

    7 Bienaventurado el varón que CONFÍA en el Señor, y cuya CONFIANZA es el Señor. 8 Por el hecho de que va a ser como un árbol plantado al lado de las aguas, que echa sus raíces al lado de la corriente, y no siente en el momento en que llega el calor, pero su hoja continúa verde; y en el año de sequía no se cansará, ni dejará de ofrecer fruto.

    Para verdaderamente comprender las implicaciones de lo que se expresa en Jeremías 17-5 es muy preciso que no solo veamos el artículo esmeradamente; sino más bien asimismo todo el contexto y el grupo de situaciones particulares que cubren esa afirmación.

    Primeramente, entendemos que fue Dios quien charló a su pueblo; pero ¿quién era su instrumento y representante? ¿Cuál era el carácter de aquel hombre a quien Dios inspiró esta extremista oración?

    Observancia del sábado

    19 De este modo me ha dicho el Señor: Ve y ponte a la puerta de los hijos del pueblo, por donde entran y van los reyes de Judá, y ponte en todas y cada una de las puertas de Jerusalén,

    20 y diles: Oíd palabra de Jehová, reyes de Judá, y todo Judá, y todos y cada uno de los moradores de Jerusalén que entráis por estas puertas.

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