El desenlace de una amistad duele, en ocasiones, interminablemente. De esta forma, y si bien tengamos claro que no es exactamente lo mismo una pareja que un amigo, en verdad, perder ese acompañamiento períodico, esa coalición de confidencias, risas y experiencias compartidas crea un mal muy comparable a la pérdida de un amor.
Extraído de www.nytimes.com
En la sociedad de la cual formamos parte, disponemos varios modelos y tácticas distintas para sobrepasar una separación. Comprendemos que el vínculo afectivo que establecemos con una pareja sentimental es profundo y lo que sentimos en la separación es universalmente reconocido. Por este motivo, nos llega toda una sucesión de reacciones compasivas que procuran sobrepasar este trance sensible. Pero, ¿qué ocurre en el momento en que lo que iremos a perder es uno de nuestros mejores amigos? Más allá de que puede ser igualmente esencial, hay una inclinación a la cuenta popular de un «vínculo desechable» e inclusive tenemos la posibilidad de sentir alguna incredulidad por parte del resto si no admitimos velozmente la separación. amigo puede ser realmente difícil, entre otras muchas cosas, por la contrariedad de no hallar acompañamiento frente a una pérdida que no todos tienen la posibilidad de estimar traumática.
Claves para el desafío de una amistad
Conociendo este mal, es claro que en el momento en que se pierde un amigo se vive un desafío con sus que corresponden fases: negación, furia, negociación, tristeza, aceptación. Por el sendero, lograras continuar estas claves para enfrentar el desafío de la mejor forma viable.
- La primera clave es NO ignorar de qué forma se ve. Las conmuevas están ahí y hay que proporcionarles relevancia. Debes ofrecerte tiempo para sentirlo, por lamentable que parezca.
Fue en una finca en Cupey Prominente donde pasé una parte de mi niñez. Era una casa como una pequeña celda en una propiedad mucho más grande. Habíamos regresado de Francia, pero mi padre sostenía íntegras las prácticas francesas: hacía pan fresco, tostaba y molía el café (recuerdo el estruendos de la máquina que muele los granos de café como la máquina que utilizan en el dentista, solo el sonido de el molinillo se encontraba exquisito ) Papá logró mermelada de mango, plantó rosas (no sé si esta práctica es francesa), tocó el piano, recogió lerenes, toronjas, tomates que saben a tomate y hasta teníamos libros en la bañera.
Fue en esa temporada, con 2 hermanos inferiores, que aprendí a realizar girar la Rueda de la Fortuna, a comer acerola, grosellas y rosales de los árboles. Además, entrené escalando los eucaliptos colosales y me sentí como un pequeño mono tanzano feliz en las llanuras del Serengeti. Un día voy a ir a Tanzania, antes de fallecer seguro!!! Y voy a ver elefantes, búfalos, zebras, leopardos, leonas en el Kilimanjaro, y me voy a dejar atravesar por sus amaneceres. Vuelvo a las montañas de Cupey Prominente, Puerto Rico…
Piensas que tu amistad va a durar toda la vida:
Debes admitir, en el momento en que comenzamos una relación cariñosa, siempre y en todo momento hay esa opción donde puede finalizar y recortar, no obstante, en el momento en que tienes un mejor amigo, esperas y confías en que va a ser para toda la existencia. Finalizar una amistad duele considerablemente más por el hecho de que jamás viste venir este instante.
Perder una amistad: romper con nuestro mejor amigo
Los motivos por los cuales se rompe un vínculo de amistad son diversos, por servirnos de un ejemplo: malentendidos, cambios inesperados de intereses, traiciones, patrañas, engaño. Sea como sea el fundamento, la separación de una amistad tiene secuelas:
- Piensa pasar por un desafío muy afín al que se vive tras romper con una pareja.
- Incluye una etapa de furia y escepticismo en el momento en que no comprendes por qué ocurrió ese acontecimiento particularmente.
- Entonces viene la etapa de confrontación con nosotros donde intentamos de hallar causas.
- Hasta el momento en que, de a poco, llega la etapa de tristeza y la posterior aceptación.